Atropello contra el Dr. Francisco Piñón Gaytán, investigador de la UAM
El pasado 18 de julio, las autoridades de la UAM comunicaron al Dr. Francisco Piñón Gaytán que se cancelaba su beca de docencia, estímulos a la trayectoria académica, docencia e investigación. El motivo: faltas a las sesiones de la comisión dictaminadora de humanidades, cargo honorario al cual el Dr. Piñón había manifestado no poder ocupar y para lo cual presentó justificantes médicos. Esta cancelación constituye una grave violación al artículo 22 de la Constitución que indica que no puede confiscarse el salario que es parte de sus emolumentos de origen público. De igual forma, es una violación del principio pro persona, su derecho a una seguridad jurídica y debido proceso. La Universidad no puede obligar a un profesor que cumple sobradamente con sus obligaciones académicas a ocupar un cargo sin su consentimiento y menos a privarle de sus ingresos. El Dr. Piñón es un académico reconocido, fundador de la UAM, con una obra importante en el campo filosófico y una persona que tiene 86 años de edad. Las autoridades de la UAM no tienen ningún derecho a cometer esa arbitrariedad.
Observatorio Filosófico de México. Mtro. Gabriel Vargas Lozano, Dr. Guillermo Hurtado, Dr. José Alfredo Torres. Dr. Aureliano Ortega (Presidente de la AFM), Dra. Carmen Camarillo; Dra. Alejandra Velázquez; Dr. Eduardo Sarmiento; Dr. Ángel Alonso, Lic. Pedro Corso, Mtro. Ernesto Barba, Dr. Juan Monroy, Dr. José Ramón Fabelo, Dr. Jaime Torres. Mtra. Patricia Díaz. Mtro. César de Rosas, Lic. Luis David Reyes.
LA DESAPARICIÓN DE LA FILOSOFÍA EN LA EDUCACIÓN MEDIA SUPERIOR
(Respuesta a la Subsecretaría de Educación Media Superior)
Gabriel Vargas Lozano, Aureliano Ortega Esquivel y Roberto Hernández Oramas (*)
Adán Martínez, José Barrón y Víctor Ramírez publicaron en La Jornada el día 29 de julio pasado, un artículo en donde se pretende descalificar, sin mencionarnos, nuestras observaciones sobre la pretendida reforma del Marco Curricular Común en el Área de Humanidades por la Subsecretaría de Educación Media Superior.
Al hacerlo, el Dr. Juan Pablo Arroyo, titular del ramo, emplea a sus subordinados para responder a las críticas que hemos hecho a su proyecto, desconociendo la representación de nuestras asociaciones y la gran cantidad de profesores y profesoras que han expresado su oposición (véase MANIFIESTO EN DEFENSA DE LA ENSEÑANZA DE LA FILOSOFÍA). Esa actitud de menosprecio es muy conocida cuando se pretende asumir una posición autoritaria sobre la base de descalificar al interlocutor que, en este caso, son asociaciones que tienen una larga y rica tradición y que representan a la comunidad filosófica nacional. Solo mencionaremos que la AFM tiene 54 años de existencia y una serie de congresos internacionales en su haber; el COAPEHUM tiene un conocimiento preciso de la situación que guarda la filosofía en las instituciones educativas de todo el país y el OFM ha desarrollado una lucha activa desde 2009, cuando el gabinete educativo de Felipe Calderón, en forma igualmente arbitraria, desapareció las disciplinas filosóficas y humanísticas de la EMS.
En el artículo de marras se dice que la filosofía no desaparece porque “está presente” en las asignaturas Humanidades I, II y III. Ya la UNESCO denunció que las disciplinas filosóficas no deben cambiar de nombre ya que ello implica un cambio de contenido, pero, además, porque contravienen tanto el artículo 3° Constitucional como la Ley general de educación, que en su artículo 30 distingue, de manera correcta, a la filosofía de las humanidades. La filosofía no se confunde y no se reduce a las humanidades ni éstas a aquella. El hecho es que en la propuesta no aparecen ya la Ética, la Estética, la Lógica y la Introducción a la filosofía como disciplinas íntegras enfocadas a la correcta formación de los estudiantes, ya que se disuelven en una suerte de “prácticas” y “conversaciones” que pretenden, a través de un método que llaman “transversalidad”, formar ciudadanos útiles, pero que ignoran, porque no tienen el referente explícito, que reflexionar y discutir acerca de su propia realidad puede llegar a ser una práctica filosófica única y exclusivamente a través del conocimiento y aplicación de herramientas discursivas y conceptuales específicamente filosóficas. Agregamos que ni el subsecretario, ni sus voceros, responden a una serie de comentarios enviados por el OFM el día 11 de julio; mismos que a la fecha no han obtenido acuse de recibo. En dicho documento se afirma que en su propuesta desaparecen también otras disciplinas como la historia, la literatura, la antropología, la geografía humana, el derecho o las diversas artes y se pretenden sustituir mediante “prácticas en que [el estudiante] desarrollará o adquirirá herramientas que lo conduzcan a pensar su entorno, sin embargo, en la propuesta solo se habla de ensamblar fragmentos de las disciplinas científicas y humanísticas.
La propuesta sigue el modelo de "campos formativos" y de la "transversalidad". Estas estrategias estuvieron presentes en la organización curricular por áreas de conocimientos en 1960, misma que experimentó ajustes en cada reforma sexenal subsecuente. Ante la pobreza de los resultados, en 1993 y hasta la actualidad, la integración de los contenidos por áreas se combinó con la organización por asignaturas”. Es decir, se trata de un modelo “fracasado”.
La fragmentación que se pretende no se identificará ni se resolverá con un enfoque como el mencionado y sólo permitirá, si acaso, una mención fugaz a cada fragmento de la realidad, propiciando la memorización (otra “bestia negra” de la propuesta”) de uno u otro de sus aspectos, pero no comprendiéndola como una totalidad articulada y compleja, sino acaso dispersándola, puesto que la “reflexión y discusión colectiva”, así se realice en “múltiples contextos”, no alcanza ni tiene recursos para lograr una verdadera formación integral. De esta manera, ni se evita la memorización ni el enciclopedismo, y sí se abre paso a una “trasversalidad” espectral e infinitamente más problemática que las “viejas” disciplinas.
Finamente, en el artículo se involucran a una serie de instituciones como la Facultad de Filosofía y Letras; el Posgrado en Filosofía y la Preparatoria núm. 8, de la UNAM, LA Asociación mexicana de la lógica, entidades que, hasta donde sabemos, no han emitido una posición oficial; pero además agregan que “son inspiración” sin aclarar en qué sentido lo son.
(*) Coordinador del Observatorio Filosófico de México (OFM); Presidente de la Asociación Filosófica de México (AFM) y Presidente del consejo para la acreditación de programas educativos en humanidades (COAPEHUM) respectivamente.
Artículo de opinión publicado en 20 de julio de 2022
Por Gabriel Vargas Lozano (Profesor/investigador del Departamento de Filosofía de la UAM-I)
En los últimos tiempos, la filosofía y las humanidades han estado bajo ataque. Gobiernos conservadores y neoliberales como los de Calderón, en México; Mariano Rajoy, en España; Fujimori, en Perú, y otros en Latinoamérica junto con los grandes medios masivos de comunicación, han eliminado o tratado de eliminar su enseñanza y difusión. Una de las tesis que aducen es que se trata de un pensamiento inútil y, por tanto, debe ser suprimido o censurado.
Desde luego que cuando hablan de inutilidad están pensando en un martillo o un desarmador, pero hay otro significado para dicho concepto y es el de que se trata de una creación humana que sirve para que las personas se conozcan a sí mismas y al medio que las rodea; se enriquezcan culturalmente; superen la enajenación y luchen por una sociedad mejor. Disciplinas como la ética son esenciales para el examen de la conducta moral; la estética inquiere sobre la valoración del arte, la literatura o simplemente la sensación que nos produce admirar a la naturaleza; el estudio de la lógica implica la organización sistemática de los argumentos evitando caer en falacias y el de la filosofía, nos permitirá entender, por ejemplo, su papel en la liberación de sociedades injustas (véase mi libro Filosofía, ¿para qué? En www.cefilibe.org).
La filosofía y las humanidades han hecho una aportación extraordinaria al conocimiento profundo del ser humano y por ello no entendemos por qué la Secretaría de Educación Pública, que forma parte esencial del proyecto de la Cuarta Transformación, no haya incluido a la filosofía dentro de sus reformas y, por el contrario, parece tratar de evitarla. Por ejemplo, tanto el Observatorio Filosófico de México (OFM) como la Asociación Filosófica de México (AFM) propusimos, desde que Esteban Moctezuma Barragán ocupó el cargo de secretario de Educación Pública, la incorporación de la filosofía para niños e incluso organizamos, con apoyo de la Comisión de Educación de la Cámara de Diputados, un coloquio sobre el tema que tuvo un enorme éxito (véase el libro Filosofía para niños y niñas en México, www.ofmx.org).
Algunas personas, que no conocen esta metodología propuesta inicialmente por Matthew Lipman y desarrollada en Inglaterra, España y Francia, entre otros países, creerá que se trata de atormentar a los pobres niños, mediante el estudio de la Crítica de la razón pura, de Kant, o la Fenomenología del espíritu, de Hegel. Nada más alejado de la verdad. Por el contrario, se trata de aplicar recursos didácticos que mediante relatos, videos, juegos, etcétera, permita a los niños desarrollar su imaginación; enseñarlos a dialogar; a respetar a los demás y a investigar los problemas que más les interesan. Esta metodología ha sido probada, por ejemplo, en la Universidad de Birmingham, llegando a la conclusión de que niños pudieron, más allá de lo que hemos dicho, mejorar en lectura y matemáticas. La filosofía para niños constituye una defensa con respecto a la violencia real y simbólica que vivimos en México y el mundo. Su incorporación sería una gran aportación de la 4T. Por otro lado, el OFM y la AFM propusimos también cursos de ética en la secundaria, pero no para confundirlos con civismo y tampoco para convertirlos en mandamientos propios del catecismo, sino para analizar los mil y un problemas morales existentes en la sociedad y que derivan tanto de la acción política como del narcotráfico, los feminicidios, la discriminación, la falta de respeto a la vida humana, etcétera. Pero también propusimos una actualización de la didáctica en los cursos impartidos en la educación media superior y nos encontramos que en la reforma que pretende desarrollar la subsecretaría correspondiente se busca aplicar el método campos formativos y transversalidad, que implica la fragmentación de las disciplinas filosóficas y humanísticas y la desaparición de su enseñanza integral.
En este sentido, el OFM, la AFM, la Coapehum, la Red Nacional de Escuelas y Facultades de Filosofía, Letras y Humanidades y profesores procedentes de 60 instituciones del país enviamos un documento al subsecretario doctor Juan Pablo Arroyo, donde afirmamos, entre otras cosas, que en su propuesta de reforma, se pierde la veta de las humanidades que refiere a lo propiamente humano en la historia, la antropología, la filosofía, la geografía, el derecho, la literatura, asignaturas con un legado que queda fragmentado en el marco curricular común para las humanidades que pretende aplicar en la educación media superior
. Es por ello que consideramos que las disciplinas filosóficas y humanísticas mencionadas deben mantenerse para ser impartidas en forma íntegra conservando sus nombres y sus temas, pues la aplicación mencionada implicaría la pérdida para las y los estudiantes de una formación básica (ver documento completo en www.ofmx.org). El subsecretario nos ha expresado que atenderá los argumentos que ha presentado la comunidad filosófica nacional y esperamos que así sea para bien de nuestra juventud.
POSICIONAMIENTO Y APOYO DESDE BAJA CALIFORNIA SUR A LA DEFENSA DE LA FILOSOFÍA EN EL NIVEL MEDIO SUPERIOR
La Paz, Baja California Sur, julio de 2022
A la opinión pública
A la comunidad humanística
A la comunidad filosófica
El pasado 5 de mayo del presente año, el Mtro. Gabriel Vargas Lozano publicó en el periódico La Jornada un artículo de opinión titulado “La Filosofía y las humanidades en la reforma de la educación media superior”. En él, además de narrar una pertinente sucesión de acontecimientos, da cuenta de dos intentos –tanto del Observatorio Filosófico de México como de la Asociación Filosófica de México– de colaborar con el Secretario de Educación Pública, Esteban Moctezuma Barragán, y posteriormente con la maestra Delfina Gómez Álvarez. Vargas Lozano asevera que no han recibido respuesta alguna que concrete una resolución contundente respecto a la presencia de la Filosofía en los planes y programas educativos de La Nueva Escuela Mexicana.
Los miembros del Centro de Investigaciones Filosóficas (CIF) de la Academia de Filosofía de la Universidad Autónoma de Baja California Sur (UABCS) nos pronunciamos a favor del apunte del Mtro. Gabriel Vargas Lozano; a saber, que es indispensable considerar a la Filosofía un cuerpo teórico, práctico y práxico que no se limita a un asunto actitudinal, sino que además se encuentra vertebrada por disciplinas que atienden esferas constituyentes de la existencia de la humanidad. La filosofía no se limita a ser una actitud deseable en las personas, sino que constituye la columna vertebral de los procesos de humanización y profesionalización que no podemos obviar.
Es indispensable que generemos prácticas y participación ciudadana y profesional en la construcción de México y la Filosofía es angular para ello.
Por una educación humanista, crítica y propositiva, fundamentada en pensamiento y valores.
Centro de Investigaciones Filosóficas de la Universidad Autónoma de Baja California Sur
Dra. Mónica B. Ramírez Solís (Filosofía e Historia de la ciencia; Estudios en ciencia, tecnología y género). Dra. Zenorina Guadalupe Díaz Gómez (Filosofía política, Ética y movimientos sociales). Dra. Magda Dinorah Valdéz Ceseña (Filosofía de la educación; Pedagogía). Dr. Humberto González Galván (Saberes originarios; Psicología; Estética). Dr. Luis Arturo Torres Rojo (Filosofía e Historiografía en México). Dr. René Moreno Terrazas Troyo (Filosofía ambiental; Ecosofías). Mtra. Ana Maley Cota Sosa y Silva (Estética; Teoría crítica; Escuelas helenísticas). Mtra. Mónica Astorga Moreno (Estudios filosófico-literarios). Lic. Arely Eunice López Lozano (Estudios filosófico-culturales; Tradición filosófica mexicana; Prácticas filosóficas contemporáneas). Mtro. Gabriel Alexander Campos Martínez (Filosofía de la educación). Mtro. Homero Francisco Salgado Pérez (Metodología; Historia de la filosofía). Dra. Andrea Lira Beltrán (Ética; Bioética). Mtra. Ana Laura Ramírez Ruiz (Ética aplicada; Filosofía de la educación). Lic. Tianna Janeth Aragón Sauceda (Prácticas filosóficas contemporáneas). C. José Rosario León Pimentel (Marx; Marxismos).
LA CUARTA TRANSFORMACIÓN VISTA DESDE LA FILOSOFÍA MEXICANA
Prólogo
Por Guillermo Hurtado
Este volumen es el tercero de una serie de estudios filosóficos sobre el régimen de la Cuarta transformación de México. El primer libro fue editado por Guillermo Hurtado, José Alfredo Torres y Gabriel Vargas en 2019 y se llamó La filosofía y la Cuarta Transformación de México. El segundo, editado por Guillermo Hurtado y José Alfredo Torres, apareció en 2021, con el título de Ensayos filosóficos sobre la Cuarta Transformación de México. En los tres libros de esta colección han participado más de treinta académicos que han abordado el tema desde una variedad de puntos de vista filosóficos, políticos e ideológicos.
El capítulo que abre esta antología es “La Cuarta transformación y su relación con los derechos humanos y la cultura de la paz. El recurso a la filosofía y a la hermenéutica” del Dr. Mauricio Beuchot, investigador emérito del Instituto de Investigaciones Filológicas de la UNAM. El autor aborda los temas de la democracia, los derechos humanos y la justicia desde la perspectiva de la hermenéutica analógica: Beuchot sostiene que la Cuarta transformación no puede descuidar el cultivo de estas tres dimensiones de la sociedad mexicana, pero, sobre todo, debe reactivarlos para alcanzar la paz que anhela el pueblo de México. Para ello, será indispensable que el régimen entienda la importancia del cultivo de la filosofía.
En el siguiente capítulo, “La narrativa de la Cuarta Transformación, reflexiones desde Platón y Aristóteles” del Dr. Héctor Zagal, catedrático de la Universidad Panamericana, se hace un análisis del discurso lopezobradorista basado en algunos conceptos de la filosofía antigua. La narrativa del presidente López Obrados, afirma Zagal, retoma varios aspectos de la idea de la historia de México del régimen priísta del siglo XX, pero la infunde de una religiosidad peculiar. La ética que subyace a ese discurso es eudemonista, aunque con visos cristianos. Según Zagal, la oposición no ha sido capaz de encontrar un discurso alternativo y, por lo mismo, carece de una manera efectiva de contrarrestar las fortalezas de la narrativa oficial.
El tercer capítulo, de la autoría del Dr. Luis Patiño Palafox, profesor de la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM, lleva como título “El presidente, la historia y la responsabilidad política”. Patiño hace un recorrido por las distintas filosofías de la historia que se han ofrecido en el México independiente para entender la concepción de la historia mexicana que defiende el presidente. Patiño afirma que más allá de su rechazo al neoliberalismo, López Obrador se distingue por la manera en la que evade su responsabilidad política. Para examinar esta característica de la conducta presidencial, Patiño echa mano de la distinción weberiana entre la ética de la convicción y la ética de la responsabilidad.
En “La cuarta transformación de México. Una aproximación filosófica”, la Dra. Virginia Aspe, profesora de la Universidad Panamericana, propone que la ideología expuesta por López Obrador en sus libros hunde sus raíces en el pensamiento socialista mexicano del siglo XIX, con autores como Ignacio Ramírez, Juan Nepomuceno Adorno y Plotino Rhodakanati, así como en la filosofía política de Enrique Dussel y Ernesto Laclau. Entre las características de la propuesta política de López Obrador, Aspe destaca las de recuperar el Estado benefactor, revertir la pirámide económica y combatir la corrupción de la política partidista.
En “Ontología y política. Consideraciones a partir de los límites de la crítica liberal frente a López Obrador”, el Dr. Carlos Alberto Bustamante, profesor de la Facultad de Filosofía de la Universidad Michoacana, distingue las diferentes concepciones sobre lo político que tienen López Obrador y sus críticos liberales. Bustamante examina las ideas de John Rawls como el paradigma del liberalismo político y las contrasta con las de otros autores como Antonio Gramsci y Chantal Mouffe que parten de distintas coordenadas. El autor afirma que la mayoría de los críticos liberales de López Obrador no han sido capaces de entender la concepción sobre la democracia y el orden constitucional que está en la base de la Cuarta transformación.
En el sexto capítulo, “Penurias y expectativas de la oposición al lopezobradorismo”, el Dr. Guillermo Hurtado, investigador del Instituto de Investigaciones Filosóficas de la UNAM hace un examen crítico de la oposición partidista al régimen actual. Hurtado advierte que la oposición ha adoptado una posición reaccionaria que no ofrece nuevas soluciones a los problemas del país: su discurso se reduce a volver al estado de cosas previo a 2018. Según el autor, el escenario mexicano es semejante al de otros países en donde la democracia liberal no ha sabido enfrentar el reto del populismo, tanto de izquierda como de derecha. Para superar la polarización que se ha generado dentro la sociedad mexicana, sostiene Hurtado, habrá que hacer el esfuerzo de repensar la democracia.
En “La paradoja de la educación”, el Dr. José Alfredo Torres, fundador del Observatorio Filosófico de México, señala una contradicción dentro de la Cuarta transformación: por una parte, el gobierno rechaza la concepción neoliberal del ser humano, de la sociedad y de la educación, pero, por la otra, ha preservado casi por completo el paradigma educativo neoliberal fundado en criterios pedagógicos eficientistas. Para desvelar el origen de esta paradoja, Torres examina las ideas de algunos educadores mexicanos del pasado, como Gabino Barreda y Jaime Torres Bodet.
En "La 4t y las mujeres: ¿La Cuarta transformación será feminista o no será?”, la Dra. María del Carmen Camarillo, catedrática de filosofía, hace un repaso de la situación de las mujeres y, en particular, del movimiento feminista, dentro del gobierno lopezobradorista. Su diagnóstico es negativo: el nuevo régimen ha hecho poco para mejorar las condiciones de las mujeres mexicanas, a pesar de que, en el discurso y en la fachada, afirme estar en favor de ellas. El aumento de los casos de feminicidio, la precarización de las mujeres trabajadoras y la falta de apoyo por parte del gobierno nos indican que la Cuarta transformación está muy lejos de ser feminista.
“El Estado-nación y sus otros” de las Dras. Ángeles Eraña, investigadora del Instituto de Investigaciones Filosóficas de la UNAM y Zenia Yébenes, profesora e investigadora de la Universidad Autónoma Metropolitana, plantel Cuajimalpa, puede leerse como un manifiesto en contra del Estado-nación mexicano. Las autoras afirman que el Estado-nación ha construido un imaginario que ha ocultado la violencia que ha ejercido en contra de las comunidades originarias para su dominio territorial, económico y cultural.
Las autoras sostienen que el proyecto de la Cuarta transformación está fundado en ese modelo del Estado-nación que ha reprimido a los pueblos indígenas. Frente a ese esquema político, Eraña y Yébenes desarrollan uno diferente inspirado en las ideas propuestas por los zapatistas de Chiapas.
El penúltimo capítulo es “Hacia una economía moral”, del Lic. Adrián Rivera Flores, alumno del posgrado en filosofía de la UNAM. En este trabajo se hace un examen de la noción de economía política desarrollado por el historiador británico Edward Palmer Thompson para compararla con la visión que López Obrador ha ofrecido sobre la movilización popular. Posteriormente, con la ayuda del concepto de “multitud” desarrollado por Antonio Negri, Rivera Flores examina de qué manera podemos poner en uso la idea de una economía moral en la Cuarta transformación
El décimo y último capítulo de esta antología es “Enrique Semo: una mirada al lopezobradorismo”, del Lic. Sebastián Reyes Tapia, alumno del posgrado de filosofía de la UNAM. El autor traza los vínculos que existen entre el pensamiento de Enrique Semo y la ideología de la Cuarta transformación y, en particular, con la posición del presidente López Obrador respecto a la relación entre México y España. Reyes Tapia explica la exigencia del presidente López Obrador de una disculpa histórica de España a los pueblos indígenas desde la perspectiva histórica anticolonial de Semo.
Este volumen forma parte de una colección intitulada “Filosofía mexicana aplicada”. Los editores estamos convencidos de que la filosofía mexicana debe atreverse a reflexionar sobre su presente para que pueda contribuir a la solución de nuestros problemas. Si algo caracteriza a las reflexiones que aparecen en este libro es que asumen una rigurosa actitud crítica como un requisito indispensable para pensar de manera filosófica acerca de esos problemas.